
Como sucede con muchos alimentos diferentes traídos al Nuevo Mundo desde la Madre España, los buñuelos se disfrutan en innumerables versiones en toda América Latina.
Dependiendo de dónde se preparen y qué ingredientes incluyan, los buñuelos pueden ser dulces, salados o algo intermedio.
Los buñuelos mexicanos son dulces y existen en dos formas principales: la versión redondeada parecida a una rosquilla que se explica a continuación, y una versión más grande y relativamente plana que se parece más a una “oreja de elefante” estadounidense.
Ambos tipos de buñuelos son populares durante las vacaciones de diciembre, y ambos se pueden comer solos o cubiertos de azúcar o un almíbar ligero de piloncillo.
Como comida frita que consiste principalmente en carbohidratos, los buñuelos no se recomiendan como comida frecuente, pero como un regalo ocasional de vacaciones / comida reconfortante, su carácter crujiente por fuera y suave por dentro es inmejorable.
Disfrute esta receta de buñuelos clásica como postre, refrigerio o incluso como un desayuno ligeramente decadente.
Ingredientes
Para la cobertura:
- 3 cucharadas de azúcar
- 1 cucharadita de canela en polvo
Para la masa:
- 1 1/2 tazas de harina para todo uso
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- 3 cucharadas de azúcar
- 1/4 taza de aceite vegetal o mantequilla
- 1 huevo grande
- 1/4 taza de leche
- 1/2 taza de masa harina
Para freír:
- 1 taza de aceite vegetal, para freír
Cómo preparar auténticos buñuelos mexicanos
- Reúna los ingredientes.
- Prepara la cobertura combinando azúcar y canela en un plato poco profundo.
- Tamizar la harina y la levadura en polvo.
- En un recipiente aparte, bata el azúcar y el aceite o la mantequilla hasta que quede suave. Agrega el huevo, la leche y la masa harina.
- Agrega poco a poco la harina, mezclando bien después de cada adición, hasta que se forme una masa.
- Enrolle la masa en esferas del tamaño de una albóndiga, de aproximadamente 1 1/2 pulgadas de diámetro. Puede dejarlos redondos o aplanarlos en pasteles.
- Caliente el aceite vegetal en una cacerola mediana hasta que esté caliente. Freír las bolas de masa o las tortas hasta que estén doradas, unos 6 o 7 minutos, y dorarlas por completo.
- Retire las bolas al plato cubierto con papel toalla para que escurran.
- Con unas pinzas, coloca cada buñuelo en el plato con la mezcla de azúcar y canela y agita hasta que esté bien cubierto, volteando la pieza si es necesario.
- Sirve tus deliciosos buñuelos calientes, con atole o chocolate caliente, si quieres.
Variaciones de recetas
- Omita el azúcar granulada y la canela y pruebe estas otras posibilidades de cobertura:
- Enrolla tus buñuelos con azúcar en polvo en lugar de azúcar granulada. El azúcar en polvo se “derretirá” y desaparecerá, pero dejará un dulce glaseado. Si lo desea, vuelva a enrollarlos en el azúcar en polvo una vez que se hayan enfriado un poco, o espolvoree un poco sobre ellos al servir.
- Prepara un almíbar ligero disolviendo un poco de piloncillo (o azúcar morena si no tienes piloncillo) en agua. Agregue un poco de canela molida y una pizca saludable de anís molido y / o clavo; mezclar bien. Vierta el almíbar, tibio oa temperatura ambiente, sobre los buñuelos, o úselo como salsa para buñuelo.
- Sirve salsa de chocolate mexicano como salsa para los buñuelos.